Por el Doctor Marcelo Capelluto*, para ParqueChasWeb


El Estado debe garantizar la inocuidad de los alimentos, y ello debe ser una prioridad para el Gobierno Nacional, y para los gobiernos provinciales y municipales. La informalidad y marginalidad gana terreno en la elaboración de los alimentos en nuestro país, y esto es fruto de la caída del poder adquisitivo, que se acentúa por la crisis económica y debido a la falta de un adecuado control de organismos públicos, es por ello que los consumidores compran alimentos que no siempre cumplen con las normas sanitarias, corriendo riesgo la salud de la población.

La causa de muchas enfermedades reside en el apetito desmedido de las industrias en querer acrecentar sus ganancias y en la negligencia y omisión de los organismos sanitarios. Un alimento de calidad, es aquel que cumple con todos los requisitos que exige el Código Alimentario Argentino, estableciendo los parámetros nutricionales, higiénico- sanitarios y sensoriales.

Si está en mal estado, o adulterado puede causar enfermedades y hasta la muerte como por ejemplo, el botulismo, la salmonella, el Síndrome Urémico Hemolítico, y otras. "La polémica más difundida es la que envuelve a los supuestos productos light o diet, que durante años hicieron creer falsamente a la gente que tenían menos calorías.

Para evitar esas lamentables confusiones, una resolución de la Secretaría de Agricultura restringió el uso de esos términos a los alimentos que contengan como mínimo 25% menos del valor energético del que tienen los productos similares que no son diet," pero ello no se controla adecuadamente. "Matilde se paró ante la góndola de galletitas y como estaba a dieta se decidió por un paquete "diet", de color verde.

En la fila para pagar, se puso a leer con atención el envase y se llevó una sorpresa: descubrió que el producto tenía 10 calorías más que las comunes de la misma marca que estaba comprando para sus nietos" Pero los engaños publicitarios no paran allí. Se habla de hamburguesas y se venden medallones de carne, estos últimos se diferencian de los anteriores porque contienen soja. A su vez las grandes cadenas de hamburgueserías deberían rotular el producto, en el envoltorio mediante un etiquetado, es decir significa que el consumidor sepa cuales son los ingredientes del producto a consumir.

Se habla de alfajores de chocolate, y se vende alfajores con baño de repostería de aceite vegetal hidrogenado, de color chocolate, pero sin ese producto, por ello se lo publicita como alfajor negro o blanco. Galletitas o quesos "sin sal", pero en las letras chicas del envase del producto dice sin sal agregada. Distintos productos llevan la leyenda "sin azúcar" y cuando leemos el rotulado dice en letras muy pequeñas "sin azúcar adicionada".

Muchas veces, la leche es adulterada con agua y es ofrecida como leche entera, la miel con agregado de jarabe de glucosa, o jarabe de maíz, o también de fructosa, es rotulada como miel pura de abejas, y ni que hablar de los productos usados en la cría de abejas, específicamente el nitrofurano, una sustancia prohibida, por ello la exportación de miel esta paralizada desde hace un año; mermeladas elaboradas con zapallo que con el agregado de saborizantes, colorantes y aromatizantes y se expenden como " mermelada de frutillas" o de otras frutas, y que hablar de la manteca, cuando en vez de ser de crema de leche, uno cuando lee el rotulado del envase, se sorprende que es de "suero de vaca", y los quesos cremoso o aquella muzarella que no se derriten cuando hacemos la pizza, porque están adulterados, conteniendo harina, y lo mismo cuando se publicita la venta de café y en realidad nos venden el café torrado con azúcar, así lo dice el rotulado del producto, no siempre visible a los ojos del consumidor, los pomelos, naranjas, limones y otros cítricos pintados, cosa que esta prohibida, pero se hace y se vende por la falta de controles por parte de los organismos del Estado.

En Olavarría se autorizó expender leche sin pasteurizar a un menor costo para la población, ante el brutal empobrecimiento, y ello está prohibido por las normas alimentarias. "En los quesos en barra baratos, en la mayoría de los casos son quesos fundidos, rehechos o reconstituidos, no son los verdaderos quesos en barra y mucha gente no lo sabe y los que venden se preocupan para que nadie lo sepa"

. La falta de control en los porcinos y sus derivados es constante, pudiéndose encontrar en negocios minoristas y supermercados "chinos" salames, jamones o chorizos sin ningún tipo de etiquetas y por ende sin control sanitario o bromatológico, sabiendo que una de las enfermedades más importantes del porcino es la triquinosis, y para evitar esta enfermedad, no se debe consumir carne de cerdo o sus derivados de dudosa procedencia. No comer carne poco cocida, sobre todo si proviene de piezas de caza, estando demostrado que un tratamiento térmico a mas de 60 0C en el centro de la pieza destruye las larvas.

A veces para abaratar los productos de la tierra, principalmente las verduras, se reemplazan los fertilizantes químicos permitidos, es decir aquellos que cuentan con aprobación oficial, con otros prohibidos como ser los desechos transportados en los camiones atmosféricos, con el riesgo sanitario que ello implica. Hay frutas y verduras que para su venta en la Ciudad de Bs. As. y en el conurbano, no pasan por el Mercado Central, que tiene un control bromatológico exhaustivo.

Hay mayor presencia de extranjeros que cultivan y venden sus productos sin ningún control bromatológico, independientemente de eludir los impuestos. Hay casas tomadas que funcionaron hasta hace muy poquito como restaurante y casa de comidas, abiertas al público, sin ninguna habilitación, por ende sin ningún control, y esto se supo y se pudo actuar por denuncias de la propia comunidad.

Recordemos los vinos adulterados, "Soy Cuyano" y "Mansero" de las bodega Nietos de Gonzalo Torraga" a cargo en ese momento de Arnoldo Torraga, donde se adulteró el vino con alcohol metílico, es decir el alcohol vegetal, o también llamado de quemar, y que causó la muerte de casi una treintena de personas durante la Administración Menem, por falta de control del Instituto Nacional de Vitivinicultura (INV), por ende del Estado.

Los funcionarios del INV fueron condenados luego que se probara que los certificados de análisis de los vinos "Mansero" y "Soy Cuyano" fueron fraguados y se omitió consignar las conclusiones de las pericias realizadas en las muestras periódicas y al azar que se toman de las partidas destinadas a la comercialización. Por ello "la Cámara en lo Civil y Comercial Federal ordenó al Instituto Nacional de Vitivinicultura (INV) indemnizar "por daño moral" a los hijos de una mujer que murió en febrero de 1993 tras ingerir vino adulterado con alcohol metílico fraccionado en damajuanas.

Se trata de Gladys del Valle Vizcarra, una de las 29 personas que fue víctima de la adulteración con metanol, ratificando así lo expedido por el juez de Primera Instancia, José Luis Tresguerras. Los camaristas Mariani de Vidal y Vocos Conesa dictaminaron que hubo "una conducta negligente e irresponsable" de los funcionarios del INV, una de cuyas funciones consiste en el control de comercialización y distribución de mercadería sometida a su aprobación.

Cuando las instituciones de control del Estado funcionan, se evitan intoxicaciones, enfermedades y hasta la muerte. "La lucha contra todo tipo de fraude vínico está respaldada por el Código Penal, artículo 200 y ss, así como la ley 14878 dispone en su art. 31 penas de tres a diez años y establece que a los fines de la calificación del delito, los jueces juzgarán cometida adulteración o falsificación, cuando cualquiera de los productos comprendidos en esa ley se le haya agregado elementos extraños a su composición natural y especialmente materias colorantes, ácidos minerales y edulcorantes no provenientes de la uva.

Son conocidas las consecuencias del fraude, adulteración, estiramiento del vino, las que se extienden desde el descrédito de la industria hasta la muerte del consumidor, como es del dominio público. (C. Nac. Casación Penal, sala 4ª, 28/04/1998 - Maiz Sánchez, Juan Aldo s/recurso de casación- magistrados: Berraz de Vidal, Hornos, Capolupo de Durañona y Vedia) .

Recientemente la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología (ANMAT) dispuso retirar del mercado dos partidas de aguas saborizadas de pomelo y manzana, después que se comprobará alteraciones que le daban mal sabor, además de detectarse la alteración de las propiedades físicas y organolépticas, es decir presencia de gases en el líquido y mal sabor. Las partidas retiradas son: Villa del Sur Pomelo, RPPA:02-503827, y Villa del Sur Manzana RPPA: Expediente 2906-13896/04. Se informó recientemente, que los productos mencionados, no eran aptos para el consumo humano como consecuencia de la alteración en las propiedades físicas.

Esto ha sido indicado por el Instituto Nacional de Alimentos, siendo la novedad informada a los responsables de bromatología de las municipalidades provinciales. Los consumidores estamos seriamente expuestos a ser víctimas de los fraudes y adulteraciones que, con demasiada frecuencia, se llevan a cabo en el proceso de producción y comercialización de los alimentos.

* Abogado.-Profesor Adjunto en las Materias "Derecho Ambiental" Régimen Jurídico de los Residuos Peligrosos" y Régimen Jurídico de los Recursos Naturales" en las Facultades de Derecho de UBA- Uces- UNLZ- Uflo y el Instituto Universitario de la Policía Federal Argentina

Agosto 2005