Construyen en Agronomía un centro de medicina nuclear modelo

Para la obra se invertirán cinco millones de dólares, los equipos comenzarían a funcionar en junio del 2006.

El centro de medicina nuclear más avanzado de Sudamérica, en el que se podrán diagnosticar enfermedades antes de que sean clínicamente detectables, se comenzó a construir el pasado mes de octubre en el barrio de Agronomía, sobre la avenida Nazca entre San Martín y Francisco Beiró.

La nueva tecnología permitirá detectar nódulos pulmonares, cáncer de pulmón de células no pequeñas, de esófago, de mama, de cabeza y cuello, de tiroides y la enfermedad de Alzheimer, entre otras patologías.


La Comisión Nacional de Energía Atómica (CNEA) es la responsable del proyecto que fue apoyado por el Ministerio de Planificación Federal, que aportó los cinco millones de dólares necesarios para contar con la tecnología a partir del primer semestre del 2006.

Los equipos fueron aportados por la Secretaría de Ciencia y Técnica y se instalarán en terrenos de la Universidad de Buenos Aires (UBA), frente al Instituto Nacional de Oncología Dr. Angel H. Roffo.

El centro llevará el nombre de "Fundación Centro de Diagnóstico Nuclear" y tendrá varios tipos de tomógrafos, algunos capaces de analizar la constitución física y hasta la anatomía de los pacientes, ya que los de uso común sólo pueden revisar tejidos.

La Fundación contará con un equipo denominado "ciclotrón", capaz de producir radioisótopos emisores de positrones, sustancias con cargas artificiales de radioactividad, y un lugar para almacenarlas llamada "radiofarmacia".

En nuestro país, más de 1.500.000 personas por año son diagnosticadas con tecnología nuclear, por lo que la CNEA, desde su creación, en 1950, se dedicó a la investigación y a las aplicaciones de las radiaciones, en medicina. Con ese concepto, surgieron los laboratorios de genética y de rayos X, y el sector de Biología y Medicina se convirtió en el de Radiobiología.

Cómo son los tomógrafos

Los tomógrafos que se utilizarán van a permitir conocer tanto la forma como el funcionamiento de un órgano.
Por ejemplo, si se analiza una cabeza se podrá detectar no solo si la forma del cráneo es normal, sino también visualizar el funcionamiento del cerebro en los momentos de procesar emociones.

Como los tomógrafos comunes detectan malformaciones en los tejidos y muchas enfermedades no producen cambios en las células, estos equipos permiten vencer esa dificultad y anticipar el diagnóstico.
Las imágenes de ambos tipos de equipos brindan resultados complementarios en 20 minutos, sin desplazar al paciente y se ven en forma integral y simultánea.

Estos equipos también permiten que los pacientes no sean pasados de un tomógrafo común a uno más avanzado, sino que las tomas se hacen en un solo momento y se reproducen por superposición.
La tomografía por emisión de positrones utiliza fármacos que se producen en el ciclotrón y que se inyectan por las venas, para lo cual el nuevo centro incorporará el laboratorio de radiofarmacia donde se efectuará la unión y el control de calidad de los radiofármacos.